La nutrición en plantas parte 2

 

 La absorción de dióxido de carbono

El CO2 entra en la planta a través de difusión. Las plantas llevan a cabo la respiración celular, y se da la necesidad de llevar a cabo un intercambio de gases, que los realizan unos pequeños poros llamados estomas, las lenticenas y los pelos absorventes (absorven los gases disueltos en agua).

• Los estomas son muy abundantes, y están formados por ostiolos, que pueden estar abiertos o cerrados. Por el día, hay mucha concentración de potasio en las células oclusivas, lo que hace que haya una elevada presión osmótica, para regular la misma, las células se hinchan de agua y esto genere la apertura del ostiolo. Por la noche ocurre el proceso inverso.
• En la lenticena, las células epidérmicas tienen mayores espacios intercelulares y menor suberificación, lo que permite el intercambio de gases mediante difusión simple. El CO2 por lo tanto, pasa de dónde hay más a donde hay menos (del exterior al interior de la planta).
• Los pelos absorventes absorven los gases disueltos en el agua.

El transporte de la savia elaborada

La savia elaborada se origina en unas zonas llamadas fuentes, gerenalmente son las hojas, y se denominan sumideros las zonas que la consumen, como las raíces.

Esta savia circula por el floema desde las hojas hasta otras partes de la planta, gracias a un movimiento específico denominado traslocación. Recorre una especie de "circuito": xilema-floema-floema-xilema

La eliminación de los productos de desecho

Los productos de desecho son procedentes del metabolismo de la planta y su eliminación se logra mediante el intercambio de gases; la excreción, que se lleva a cabo con procesos como la caída de las hojas o la corteza y es la eliminación de los productos de desecho; y la secreción, este se suele confundir a menudo con la excreción, sin embargo mediante la secreción se secretan sustancias con el objetivo de lograr un beneficio en la planta. Hay dos tipos de tejidos secretores: los epidérmicos, un ejemplo de esto es la secreción del néctar que realizan los nectarios; y los internos, como los que realizan la secreción del látex o de la resina.